El Ingeniero Hidráulico y Civil Jorge Daniel Bacchiega del INA nos dio una clase magistral en el Salón Blanco del Palacio Municipal. Claridad en los conceptos, alejado de posicionamientos políticos y centrado en la cuestión técnica.
Algunos de sus conceptos:
Sobre la inundación de agosto: Salto se inundó porque llovió mucho más de la media en suelos sin capacidad de absorción por lluvias anteriores.
Pero también hizo una descripción y comparación con inundaciones anteriores. Explicó que estas inundaciones no son causa del Cambio Climático y que pensar eso es simplificar el problema y no asumir el verdadero origen del mismo.
Factores que calificó como menores en el impacto de una inundación de esta magnitud:
Limpieza de márgenes del río, puentes que obstruyen el paso del agua, canales, sean estos clandestinos o aprobados, impermeabilización urbana, y obstáculos en el río (caso Molino Quemado o esclusas). Los minimizó en una inundación semejante, pero aclaró que es mejor que no existan esos factores porque la suma de ellos contribuyen a potenciar los anegamientos. Puso como ejemplo el puente de la ruta 51 en Arrecifes. Si a ese puente se le amplía el arco de paso del agua, eso permite disminuir el nivel del río en 60 cm.
En el caso de Salto, y del Molino Quemado específicamente remarcó que no es un problema porque está aguas arriba. Este tipo de obstáculos generan complicaciones aguas abajo.
Factor clave para un desastre como el ocurrido en la ciudad: La falta de planificación urbana (desde siempre).
La cercanía del río de la urbanización de la ciudad hace de Salto una “CIUDAD VULNERABLE”.
Esto es así porque Salto y también Pergamino, tienen barrios construidos en lo que se denomina valle de inundación. Ese sector es el que usa el río para expanderse en las periódicas crecidas que ocurren en nuestra región.
El concepto también vale para los campos que se siembran en el valle de inundación del río. Invariablemente esos cultivos estarán condenados cada una determinada cantidad de años (recurrencia) a perderse por anegamientos.
Planteó obras para mitigar los efectos de estas crecidas. Las clasificó como estructurales o no estructurales.
Destacó que las mismas deben ser consensuadas por técnicos y ciudadanía, y articuladas por el sector político, pero es imprescindible la comunicación por parte de los técnicos a la comunidad de los beneficios y riesgos que implica cada obra planteada.
La descripción de las propuestas es un tema largo, pero no menos interesante. De a poco las iremos publicando en METEOSALTO.
